LA GENTE DEL LIBRO

 

Para los tiempos de la llegada de sayyedina Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, el grupo de gente que decían ser los guardianes y seguidores de sayyedina Musa se habían dado a conocer como ‘los Judíos'. Ellos decían que sayyedina ‘Isa no era el Mesías que tanto habían esperado (y que aun dicen que están esperando hoy en día), y que sayyedina Muhammad no era un Mensajero de Allah, y que nada más ellos eran los bien guiados.

También, el grupo de gente que decían todavía ser los guardianes y seguidores de las enseñanzas de sayyedina ‘Isa se habían dado a conocer como ‘los Cristianos'. Ellos aceptaban que sayyedina Musa había sido un Mensajero de Allah, pero decían que sayyedina ‘Isa había traído un nuevo convenio, que sayyedina Muhammad no era un Mensajero de Allah, y que nada más ellos iban a ser salvados en el Día de la Resurrección.

Se debe de acordar uno que sayyedina Musa y sayyedina ‘Isa, la paz sea con ellos, habían sido mandados específicamente a la Tribu de Israel, y que durante el periodo de tiempo en el cual fue revelado el Corán la mayoría de gente en el Medio Oriente y el Norte de Africa que decían ser Judíos o Cristianos todavía eran descendientes de la Tribu de Israel – aunque cómo acabamos de ver, las versiones Europeas del Judaísmo y del Cristianismo estaban, en ese entonces, empezando a tomar un lugar fuerte con gente que no pertenecía a la Tribu de Israel.

Fue solamente durante los siglos que siguieron después de la muerte del Profeta Muhammad en el año11 AH/ 632 de la edad Cristiana, que Allah lo bendiga y que le de paz, que las religiones del Judaísmo y Cristianismo fueron adoptados y adaptados y definidas otra vez para gente que no eran para los que había sido destinado el Taurah y el Ingil, o sea la gente que durante los siglos después del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, que practicaban el Judaísmo y el Cristianismo no descendían de la Tribu de Israel.

Existen muchos ayat en el Corán que son dirigidos a los Judíos o a los Cristianos, o ambos a la vez, en los cuales son descritos como Judíos o como Cristianos o como ‘la Tribu de Israel' o como ‘la Gente del Libro', un titulo que indicaba, más entonces que ahora, su común descendencia con la Tribu de Israel al igual que el hecho que su manera de vida era todavía, aunque no mucho, basado en las revelaciones divinas anteriores.

Seria provechoso considerar algunos de estos ayat, ya que aclaran la naturaleza original al igual que contenido original de las enseñanzas de sayyedina Musa y sayyedina ‘Isa – y esto incluye las enseñanzas de todos los Profetas y Mensajeros que fueron mandados durante el tiempo entre los dos – y como fueron cambiadas estas enseñanzas en tiempos posteriores por los que decían seguirlos.

Por consiguiente primero consideraremos los ayat que son principalmente dirigidos a los Judíos, luego veremos los que son dirigidos principalmente a los Cristianos, y finalmente los que son dirigidos en términos generales a cualquiera de los dos o a ambos grupos como ‘la Gente del Libro'.

LOS JUDÍOS

Describiendo a los Judíos, Allah dice:

“¿Pretendéis que os crean cuando una parte de ellos ya habían oído la palabra de Allah y, a pesar de haberla comprendido, lo alteraron conscientemente?

Cuando se encuentran con los que creen dicen: Creemos; pero cuando se quedan a solas entre ellos dicen: ¿Es que les vais a contar lo que Allah os dio a conocer para que lo utilicen ante vuestro Señor como argumentos contra vosotros?

¿Es que no entenderéis?

¿Acaso no saben que Allah conoce lo que guardan en secreto y lo que divulgan?

Los hay que no saben ni leer ni escribir y no conocen el Libro, tan sólo son sus deseos y no hacen sino suponer. ¡Ay de los que reescriben el Libro con sus propias manos y luego dicen: Esto procede de Allah! Lo hacen vendiéndole a bajo precio. ¡Ay de ellos por lo que han escrito sus manos! ¡Ay de ellos por lo que se han buscado!

Dicen: El Fuego sólo nos tocará un número determinado de días. ¿Es que acaso habéis hecho un pacto con Allah – Y Allah no falta a Su pacto – o es que decís sobre Allah lo que no sabéis?

Pero no, el que haya adquirido maldad y esté rodeado por sus faltas... Esos son los compañeros del Fuego, donde serán inmortales.

Y los que crean y practiquen las acciones de bien... Esos son los compañeros del Jardín, donde serán inmortales.

Y cuando hicimos que los hijos de Israel tomaran sobre sí el Compromiso. Les dijimos: No adoraréis a otro que Allah, haréis el bien a vuestros padres así como a los parientes, a los huérfanos y a los pobres; hablaréis a la gente de buena manera, estableceréis el salat y entregaréis el zakat.

Luego, exceptuando unos pocos, disteis la espalda y os desentendísteis. Y cuando os hicimos tomar el Compromiso: No derramaréis la sangre de ninguno de los vuestros ni lo expulsaréis del lugar donde viva. Lo aceptásteis y sois testigos de ello.

Luego fuisteis de tal condición que os matásteis unos a otros y expulsásteis a una parte de los vuestros de sus hogares, recurriendo para ello al delito y a la injusticia. Y no obstante, si luego venían a vosotros cautivos de otros, pagabais su rescate cuando, en contra de la prohibición, habíais sido vosotros mismos quienes los habíais expulsado. ¿Es que vais a creer en una parte del Libro y en otra no? El pago de los que de vosotros hagan eso será, en esta vida, la humillación, y en el Día del Levantamiento se les someterá al más severo castigo. Allah no está inadvertido de lo que hacen.

Esos son los que han vendido la Otra Vida a cambio de la vida de este mundo. No se les aliviará el castigo ni serán auxiliados.

Ya le dimos el Libro a Musa y enviamos, tras él, a otros mensajeros. A Isa, el hijo de Maryam, le dimos las pruebas evidentes y le ayudamos con el Espíritu Puro.

¿Acaso no os llenábais de soberbia cada vez que venía a vosotros un mensajero trayendo lo que no deseaban vuestras almas? A unos los tomásteis por mentirosos y a otros los matásteis.

Dicen: Nuestros corazones están cerrados. ¡Maldígalos Allah por su incredulidad! ¡Qué poco es lo que creen!

Y ahora que les ha llegado un libro de Allah, que es una confirmación de lo que ya tenían, no creen en él, a pesar de reconocerlo y de que en orto tiempo pidieron auxilio contra los incrédulos* . ¡Que la maldición de Allah caiga sobre los incrédulos!

*[Cuando dijeron: ¡Allah, auxílianos con el Profeta que ha de venir al final de los tiempos y que hemos encontrado descrito en el Torá!]

¡Por qué mal precio han vendido sus almas! Haberse negado a creer en lo que Allah ha hecho descender, sólo por envidia de que Allah haya hecho descender parte de Su favor sobre aquel de Sus siervos que ha querido. Y así se han ganado la ira tras ira. Los que se niegan a creer, tendrán un castigo denigrante.

Y cuando se les dice: ¡Creed en lo que Allah ha hecho descender! Dicen: Creemos en lo que se nos hizo descender a nosotros antes, pero no lo que nos ha venido después. Sin embargo esto último es la verdad que confirma lo que ya tenían. Di: ¿Por qué entonces mátasteis a los profetas de Allah si erais creyentes?

Ya vino a vosotros Musa trayendo consigo las pruebas claras y a pesar de ello, en su ausencia, tomásteis el becerro y fuisteis injustos.

Y cuando pactamos con vosotros la Alianza, levantando el monte y poniéndolo sobre vuestras cabezas: ¿Tomad lo que os damos con fuerza y oíd!

Dijeron: Hemos oído y desobedecemos. Sus corazones se habían impregnado del becerro, por pura incredulidad.

Di: ¡Que malo es lo que os manda vuestra creencia, si fuérais creyentes! Di: Si es verdad que la morada de la Ultima Vida junto a Allah os pertenece en exclusiva sin incluir al resto de los hombres, desead entonces la muerte si sois sinceros.

Pero nunca la desearán por temor a lo que sus manos presentan. Allah conoce perfectamente a los injustos.

Encontrarás que son los hombres con más apego a la vida, como les ocurre a algunos idólatras, que desearían vivir mil años. Pero aunque los vivieran, eso no les salvaría del castigo... Allah ve lo que hacen.” (2.75-96).

Es interesante, a lo que se refiere estos últimos ayat, considerar el siguiente pasaje de Ash-Shifa' de Qadi' Iyad, tomado de la sección que considera la inimitabilidad del Corán:

Otro aspecto claro de su inimitabilidad son los ayat que describen la incapacidad de la gente en ciertos casos de responder a un reto particular informándoles a la vez que no iban a poder hacerlo. Y de hecho no pudieron hacerlo. Esto es ilustrado por lo que Allah dice sobre los Judíos: ‘Di: “Si es verdad que la morada de la Ultima Vida junto a Allah os pertenece en exclusiva... desead entonces la muerte si sois sinceros.”' (2.94).

Abu Ishaq az-Zajjaj dijo, “Este ayah contiene la prueba mas grande y una clara señal de la integridad de Su Mensaje porque El les dijo, ‘desead entonces la muerte,' y le informo a los Judíos que nunca van a desear la muerte y resulto que ninguno de ellos acabo deseando la muerte. El Profeta dijo, ‘Por Aquel que tiene en su mano mi alma, ningún hombre de ellos podía decir esto sin ahogarse en su propia saliva,' o sea morir al momento. (Al-Bayhaqi). Entonces Allah volteo a los Judíos lejos de desear la muerte y los aterrorizo para manifestar la veracidad de Su Mensajero y de la integridad de lo que se le había sido revelado ya que ninguno de ellos en verdad deseaba la muerte y aun si hubieran podido desear la muerte todavía hubieran sido ansiosos de rechazarlo. Pero Allah hace lo que El quiere. Con esta ayah sus milagros son evidentes y su prueba clara."

Abu Muhammad al-Usayli dijo, “Una cosa sorprendente de este asunto es que no hubo un grupo o un individuo entre los Judíos desde el día que Allah le ordeno a Su Profeta decir esto que se acercara en contra de él o que le contestara. Se quedo disponible para cualquiera de ellos que quisiera ponerlo a prueba.” (Ash- Shifa' de Qadi' Iyad: 1.4.8).

También hay otro pasaje similar en Surat al-Jumu'a:

“Aquellos a quienes les fue encomendada la Torá y no actuaron conforme a ella, se parecen a un asno que lleva una carga de libros. Qué mala es la semejanza de la gente que negó los signos de Allah. Allah no guía a la gente injusta.

Di: ¡Vosotros que practicáis el judaísmo! Si pretendéis que sois los amigos exclusivos de Allah frente al resto de los hombres, pedid la muerte si es verdad lo que decís.

Pero jamás la desearán por lo que muestran sus manos. Allah conoce a los injustos.

Di: Tened por seguro que la muerte, de la que huís, os encontrará y luego regresaréis al Conocedor del No-Visto y de lo Aparente que os hará saber lo que hayáis hecho.” (62.5-8).

Otra referencia de como los Judíos mataron a algunos de los Profetas que les fueron mandados después de los tiempos de sayyedina Musa se encuentra en Surat al-Ma'idah:

“Exigimos la alianza a los hijos de Israel y les enviamos mensajeros. Cada vez que les llegaba un mensajero que traía lo que sus almas no deseaban, lo negaban o lo mataban.

Pensaron que no sufrirían ninguna prueba y se cegaron y ensordecieron. Después Allah volvió a ellos, pero muchos se cegaron de nuevo y se ensordecieron. Allah ve lo que hacen.” (5.70-71).

Fue porque se volvieron ciegos y sordos a las señales de Allah la razón de que la Tribu de Israel fue eventualmente invadida dos veces:

“A Musa le dimos el Libro y lo hicimos una guía para los hijos de Israel: No toméis aparte de Mí nadie a quien encomendaros.

¡Descendientes de aquellos que llevamos con Nuh realmente Nuh era un siervo agradecido!

Y en el libro decretamos para los hijos de Israel: Por dos veces corromperéis en la tierra y os llenaréis de una gran soberbia.

Y cuando llegó lo prometido en relación a la primera de ellas, enviamos contra ellos siervos Nuestros de una gran violencia que penetraron en el interior de las casas y fue una promesa cumplida.

Luego os dimos el turno contra ellos y os dimos abundancia de riqueza e hijos y os hicimos más numerosas en tropas.

Si hacéis el bien, lo haréis para vosotros mismos; y si hacéis el mal lo haréis en vuestra contra. Y cuando llegó lo prometido en relación a la última de las veces, fue para que entraran en la Mezquita como lo habían hecho la primera vez y arrasaran todo lo que conquistasen.

Tal vez vuestro Señor se apiade de vosotros. Pero si reincidís, reincidiremos. Hemos hecho que Yahannam sea una prisión para los que se niegan a creer.” (17.2-8).

Están de acuerdo los comentaristas del Corán que la ‘primera' destrucción mencionado en el pasaje que acabamos ver se refiere a la invasión del Rey Neduchadnezzar en el año 568 antes de la Era Cristina, cuando el Templo de Sulayman fue destruido, y muchos de la Tribu de Israel fueron llevados a Babilonia como esclavos.

Y también están de acuerdo los comentaristas del Corán que la ‘segunda' destrucción mencionado en el pasaje que acabamos de ver se refiere a la ocupación de Palestina por los Romanos lo cual coincidió con la llegada de sayyedina ‘Isa, la paz sea con él, y lo cual culmino en la destrucción, por segunda vez, del Templo de Sulayman en el año 70 después de la Era Cristiana, y el cual nunca ha sido reconstruido.

En gran parte fue el resultado de estos dos sucesos grandes que la ‘Tribu de Israel' se volvió esparcido y dispersado, inicialmente por el Medio Oriente y el Norte de Africa, y más tarde por todo el mundo – aunque cómo ya vimos al final del Capitulo Cuatro, fue de hecho el resultado de la invasión Assyria en año 722 antes de la Edad Cristina que nueve y medias de las doce tribus de la Tribu de Israel aparecen ya haber de repente ‘desaparecidos' misteriosamente de los registros de la historia Judía y nunca vuelven a ser mencionados por los historiadores Judíos.

Cómo ya vimos, fue las dos tribus que quedaban – la tribu de Judah y la tribu de Levi, (junto con parte de la tribu de Benjamin) – que se asignaron como guardianes de las enseñanzas de sayyedina Musa, que la paz sea con él, y quienes con el tiempo llegaron a ser conocidos como ‘los Judíos', un titulo que probablemente es un derivado de la abreviación de Judah o Judea. Fue este relativamente pequeño grupo de lo que quedaba de la original Tribu de Israel quienes al pasar el tiempo volvieron a reescribir el Taurah mas de una vez, y quienes – después de rechazar a sayyedina ‘Isa, la paz sea con él – volvieron a redefinir el contenido del Taurah por medio de comentarios escritos y reinterpretaciones mas de una vez, y son de este pequeño grupo que descienden los Judíos Sefarditas y Orientales.

Se debe también enfatizar al relatar esto que la Tribu turca de los Khazars – quienes como ya vimos, estaban originalmente establecidos en el Cáucaso entre el mar Negro y el mar Caspio, y quienes se convirtieron al Judaísmo por razones políticas durante el siglo 8 de la Era Cristina, y de quienes la mayor parte de los Judíos Ashkenazi descienden - no son descendientes de cualquiera de las doce tribus de Israel, con quienes no tiene ninguna conexión lingüista o de descendencia, aparte del hecho que todos descendieron de sayyedina Adam y sayyedina Nuh – al lado del resto de la humanidad – los Judíos Sefarditas y Orientales descendieron de Shem, el hijo de Nuh, y los Khazar o Judíos Ashkenazi descendieron de Yafeth, el hijo de Nuh - ¡Y por eso aveces son descritos como ‘la tercera tribu'!

Como Allah señala en el Corán, como parte de los Judíos son ciegos y mudos a las señales de Allah, y como esto se manifiesta en mantener oculto lo que les ha sido revelado – no solamente de otras gentes si no que hasta de sus mismas gentes:

“No han aprecido a Allah en su verdadera magnitud, al decir: Allah no ha hecho descender nada sobre ningún mortal.

Di: ¿Quién hizo descender el libro que trajo Musa, luz y guía para los hombres? Lo ponéis en pergaminos que mostráis, aunque ocultáis mucho de él; y se os ha enseñado lo que no sabíais ni vosotros ni vuestros padres.

Di: Allah; luego déjalos que jueguen en su inútil palabrería.” (6.91).

También hace claro el Corán que parte de lo que han hecho los Judíos no es solamente ocultar partes de lo que se les ha sido revelado en el Taurah, si no que también han hasta cambiado su contenido de este. Y quienquiera que cambie las revelaciones de Allah se esta metiendo a graves problemas:

“Pregunta a los hijos de Israel, cuántos signos claros les dimos. Aquel que cambie la bendición de Allah después de haberle llegado... Es cierto que Allah es Fuerte castigando.” (2.211).

Allah también dice:

¿Y quién es más injusto que quien inventa una mentira sobre Allah o dice: Yo he recibido la inspiración, cuando no se le ha inspirado nada; y dice: Haré descender algo similar a lo que Allah hace descender?

Y si vieras cuando los injustos estén en la agonía de la muerte y los ángeles tiendan su mano: ¡Expulsad vuestras almas!

Hoy se os pagará con el castigo del envilecimiento, por lo que decíais sobre Allah sin ser verdad y porque os llenasteis de soberbia ante Sus signos.” (6.93).

“Los que oculten lo que del Libro de Allah se ha hecho descender vendiédolo a bajo precio, no ingerirán en sus vientres sino el Fuego. Y el Día del Levantamiento, Allah no les hablará ni los purificará. Tienen un doloroso castigo. Esos son los que venden la guía a cambio del extravío y el perdón a cambio del castigo. ¡Cómo se buscan el Fuego! Todo porque Allah ha hecho que descienda el Libro con la verdad, y ellos, que discuten sobre el Libro, son los que se oponen profundamente a ella.” (2.174-177).

Y:

“A los que oculten las evidencias y la guía que hemos hecho descender, después de haberlas hecho claras para los hombres en el Libro, Allah los maldecirá y los maldecirán todos los maldecidores. Salvo los que se vuelvan atrás, rectifiquen y lo pongan en claro* ; a ésos les devolveré Mi favor, pues yo soy el que se vuelve sobre el siervo, el Compasivo.

*[Lo que ocultaron y tergiversaron]

La maldición de Allah, la de los ángeles y la de los hombres, a la vez, caerá sobre los que se hayan negado a creer y hayan muerto siendo incrédulos.” (2.159-161).

Es un resultado de todas las alteraciones – en el texto original y también por medio de redefiniciones logrados por medio de ‘interpretaciones' y ‘comentarios' – a las enseñanzas originales de sayyedina Musa, que muchos de los Judíos – aun en nuestros tiempos continúan rechazando a sayyedina ‘Isa y sayyedina Muhammad – y siempre han discutido entre ellos mismos, como Allah lo señala en los siguientes ayat:

“Ya le dimos el Libro a Musa y hubo diferencias sobre él. Y si no hubiera sido por un palabra previa de tu Señor se habría decidido entre ellos, que dudan de él con desconfianza.” (11.110 y 41.45).

Y:

“Y a los hijos de Israel les dimos el Libro, el Juicio y la Profecía, les dimos cosas buenas como provisión y los preferimos por encima de los mundos. Y les dimos pruebas claras de lo que debían asumir. No hubo diferencias sino después de haberles llegado el conocimiento, a causa de envidias mutuas. Tu Señor juzgará entre ellos el Día del Levantamiento sobre lo que discreparon.” (45.16-17).

Y:

“Y no se dividieron sino después de haberles llegado el conocimiento, por envidias entre ellos. Y si no hubiera sido por una palabra previa que establecía un plazo fijo, se habría decidido entre ellos. Y los que, después de ellos, han heredado el Libro están recelosos en la duda.” (42.14).

Y:

“Es verdad que le dimos el Libro a Musa, no tengas ninguna duda del encuentro con Nosotros; y lo hicimos un guía para los hijos de Israel. E hicimos de algunos de ellos dirigentes que guiaban según Nuestro mandato, mientras eran pacientes y tenían certeza de Nuestros signos.

Tu Señor resolverá entre ellos el Día del Levantamiento acerca de lo que discrepaban.” (32.23-25).

Y:

“Realmente el sábado se les impuso a los que discrepaban sobre él y de cierto que tu Señor juzgará entre ellos el Día del Levantamiento sobre aquello en lo que discrepaban.” (16.124).

Y:

“Realmente esta Recitación les refiere a los hijos de Israel la mayor parte de aquello sobre lo que no estaban de acuerdo entre ellos. Y ciertamente es un guía y una misericordia para los creyentes. Tu Señor decidirá entre ellos con Su juicio; El es el Poderoso, el Conocedor.” (27.76-78).

El siguiente pasaje de Surat an-Nisa es más especifico:

“La gente del Libro te pedirá que hagas descender para ellos un libro del cielo. Ya le pidieron a Musa cosas mayores: le dijeron: Haz que veamos a Allah directamente, y el rayo los fulminó por su injusticia. Luego tomaron el becerro* a pesar de haberles llegado las evidencias.

Se lo perdonamos y le dimos a Musa una autoridad clara.

*[Como objeto de adoración]

Y les pusimos el monte por encima para hacerles aceptar la Alianza* y les dijimos: Entrad por la puerta* con la cabeza inclinada. Y les dijimos: No dejéis de cumplir con el sábado.

Y les hicimos aceptar un firme compromiso.

*[El compromiso de ser fieles a la Torá]

*[De Jerusalén].

Por haber roto su compromiso, por haber negado los signos de Allah, por haber matado a profetas sin derecho alguno y por haber dicho: Nuestros corazones están cerrados.

Pero no es así; sino que Allah les ha sellado el corazón a causa de su incredulidad* y haber dicho contra Maryam una calumnia enorme.

*[Al haber negado a Isa]

Y por haber dicho: Nosotros matamos al Ungido, hijo de Maryam, mensajero de Allah. Pero, aunque así lo creyeron, no lo mataron ni lo crucificaron. Y los que discrepan sobre él, tienen dudas y no tienen ningún conocimiento de lo que pasó, sólo siguen conjeturas. Pues con toda certeza no lo mataron.

Sino que Allah lo elevó hacia Sí, Allah es Poderoso y Sabio.

Y entre la gente del Libro no hay nadie que, antes de su muerte, no vaya a creer en él. Y el Día del Levantamiento él dará testimonio de ellos.

Y a los judíos, por su propia injusticia y por lo mucho que se desviaron del camino de Allah, les prohibimos cosas buenas que antes les estaban permitidas.

Y por haber adoptado la usura que ya les estaba prohibida, y haber usurpado los bienes de los hombres con falsedad. Hemos preparado para los que de ellos hayan caído en la incredulidad un castigo doloroso.

No obstante a los que de ellos están afianzados en el conocimiento, a los que creen en lo que te ha descendido a ti y en lo que descendió antes de ti, a los que establecen el salat, dan el zakat y creen en Allah y en el Ultimo Día; a ésos les daremos una gran recompensa.” (4. 153-162).

Es irónico que aunque el Corán aclara la mayoría de las cosas de los cual la Tribu de Israel – y posteriormente los Judíos – llegaron a estar en desacuerdo, la mayoría de ellos en todas las épocas desde que fue revelado el Corán, también han escogido en estar en desacuerdo con el Corán, especialmente porque uno de los hechos de los cual les recuerda el Corán es que el Taurah original profetizaba la llegada no solamente de sayyedina ‘Isa, sino que también la llegada de sayyedina Muhammad, que Allah los bendiga a los dos y que les de paz. Por lo tanto en describir a los que creen en las Señales de Allah – incluyendo al Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz – Allah dice:

“Esos que siguen al Mensajero, el Profeta iletrado, al que encuentran descrito en el Torá y en el Inyil, y que les ordena lo reconocido y les prohibe lo reprochable, les hace lícitas las cosas buenas e ilícitas las malas y los libera de las cargas y de las cadenas que pesaban sobre ellos. Y aquéllos que creen en él, le honran, le ayudan y siguen la luz que fue descendida con él; ésos son los afortunados.” (7.157).

Y, haciendo referencia a la revelación del Corán – y por lo tanto a la llegada de Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz:

“Está en las escrituras de las primeras comunidades. ¿No les sirve de prueba que lo conozcan los sabios de los hijos de Israel? (26.196-197).

En este contexto el siguiente pasaje de Ash-shifa´ de Qadi' Iyad también es de interés:

‘Ata ibn Yasar dijo, “Conocí a ‘Abdulah ibn ‘Amr ibn al-‘As y dije, ‘Descríbeme al Mensajero de Allah.' El contesto, ‘¡Por supuesto! Por Allah, algunas de las características con lo que lo describe el Corán también pueden ser encontradas en el Taurah. Este dice: “Oh Profeta, Te hemos mandado como un testigo, uno que trae buenas noticias y un advertidor y un refugió para los analfabetas. Tu eres Mi siervo y Mi Mensajero. Te he llamado como el que le tiene confianza la gente, uno que no es rudo ni vulgar y quien ni grita en los mercados ni paga el mal con el mal, si no que más bien perdona. Allah no se lo llevara de regreso con El hasta que la comunidad chueca haya sido puesto recto por él y dicen, ‘No hay Dios más que Allah.' Por medio de él, ojos ciegos verán, oídos sordos y corazones cubiertos serán abiertos.'” Algo similar es reportado por Abdulah ibn Salam y Ka'b al-Ahbar.

Una pista de transmisión de Ibn Ishaq dice, “Quien no gritara en los mercados ni usara palabras obscenas ni palabras indecentes. Le he dado toda excelente cualidad y todo rasgo noble. He hecho la tranquilidad su prenda, devoción su lema, el temor de Allah su consciencia, sabiduría su comprensión, su naturaleza será la verdad y lealtad, el perdón y el comportamiento correcto su carácter, justicia su comportamiento, la verdad su shari'a, la dirección al camino recto su líder, Islam su religión y Ahmad su nombre. Lo guiare de la falsa dirección y lo enseñare después de su ignorancia. Lo elevare después de la obscuridad. Haré su nombre conocido después de que no lo haya conocido nadie. Le daré después de mucha carestía. Lo haré rico después de la pobreza. Lo juntare después de la separación. Por medio de él juntare diferentes corazones y esparcidas pasiones y diferentes comunidades. Haré de su comunidad la mejor comunidad que haya salido de la gente.”

En otro hadith, el Mensajero de Allah nos dijo como lo había descrito el Torah: “Mi siervo, Ahmad, el Escogido, nacido en Makka, quien emigrara a Madina (o dijo Tayyiba), su comunidad será de los que alaban a Allah en todo estado.” (Relatado por as-Darimi de Ka'b; y por at-Tabarani y Abu Nu'aym de Ibn Mas'ud). (Ash-Shifa de Qadi ‘Iyad: 1.1.2).

Muchos de los Judíos que vivían durante el tiempo del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, reconocieron quien era de la descripciones de él en el Torah. Solamente unos pocos aceptaron el Islam como resultado, mientras que la mayoría se quedaron determinado en oponérsele.

Safiyya bint Huyayy, por ejemplo, era una de las esposas del Profeta Muhammad, que las bendiciones y paz de Allah sean con él y con su familia y con sus compañeros, y descendía de sayyedina Harun, el hermano de sayyedina Musa, y era miembro de la tribu Judía de Banu Nadir. Cuando hablaba de su niñez, ha sido relatado que ella dijo:

Yo era la favorita de mi padre y también la favorita de mi tío Abu Yasir. Siempre que me veían con uno de sus hijos me levantaban a abrazarme. Cuando llego el Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que le de paz, a Madina, mi padre y mi tío fueron a verlo. Era muy temprano en la mañana entre el amanecer y la salida del sol. No regresaron hasta el anochecer. Regresaron cansados y deprimidos, caminado despacio con pasos lentos y pesados. Les sonríe como siempre, pero ninguno de los dos me tomaron en cuenta porque estaban muy tristes. Escuche a Abu Yasir preguntarle a mi padre:

‘¿Es él?'

‘Si, es el.'

‘¿Puedes reconocerlo? ¿Lo puedes verificar?'

‘Si, lo reconozco muy bien.'

‘¿Qué sientes hacia él?'

‘Enemistad, enemistad por el resto de mi vida?' (Las Esposas del Profeta por Ahmad Thomson, p.68-69, referiendose de as-Sirat ar-Rasulu'llah por Muhammad Ibn Ishaq, p.354-355).

Otra conversión al Islam importante de un Judío en los tiempos del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, fue la de ‘Abdulah ibn Salam de los Banu Qainuqa', uno de los rabinos líderes de los Judíos. Ha sido transmitido por Anas que cuando escucho de la llegada del Profeta Muhammad a Madina, ‘Abdulah ibn Salam fue con él y le dijo, ‘Te preguntare tres cosas que solamente un Profeta sabría: ¿Cuál es la primera señal de la Hora (el fin del mundo)? ¿Cuál será la primera comida que comerán la gente del Jardín? ¿Y porque se asemeja un niño (o niña) a su padre y porque se asemeja a su tío materno?'

El Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, contesto, ‘Jibril me acaba de decir las respuestas: A lo que se refiere de la Hora, será un fuego que hará juntarse a la gente del occidente con la gente del oriente; a lo que se refiere de la primera comida que comerán la gente del Jardín, será hígado de pescado; y a lo que se refiere de la semejanza de un niño – si el hombre tiene relaciones sexuales con su esposa y el fluido de él sale antes que la de ella, entonces será como él – y si sale el fluido de ella antes que la de él, entones será como ella.'

‘Abdulah ibn Salam de inmediato dijo, ‘Yo atestiguo que eres el Mensajero de Allah,' y luego agrego, ‘Oh Mensajero de Allah, los Judíos son mentirosos, y si escuchan de mi Islam antes de que les preguntes sobre mi, dirán mentiras de mi.' Entonces cuando estaban llegando los Judíos, ‘Abdulah se metió a la casa, y el Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que el de paz, les dijo, ‘¿Qué tipo de hombre es ‘Abdulah ibn Salam entre ustedes?' Ellos contestaron, ‘Él es el más erudito de entre nosotros y su padre era el más erudito de entre nosotros, y es el mejor de nosotros y el hijo del mejor entre nosotros.'

Luego el Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que le de paz, dijo, ‘¿Qué pensarían si ‘Abdulah aceptara el Islam?' Ellos contestaron. ‘¡Que Allah lo libre de eso!' Luego salió ‘Abdulah con ellos y dijo, ‘Yo atestiguo que no hay dios mas que Allah – y que Muhammad es el Mensajero de Allah,' con escuchar esto dijeron, ‘¡Él es el peor de nosotros y el hijo del peor de nosotros!' y continuaron diciendo calumnias sobre él. (Al-Bukhari).

Por lo tanto es claro de relatos históricos contemporáneos autenticados que la Tribu de Israel, que después llegarían a ser conocidos como Judíos, siempre estaban conscientes de la llegada del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, y en consecuencia la invitación de Allah a los Judíos ha permanecido como siempre lo ha sido:

“¡Hijos de Israel! Recordad los beneficios con los que os favorecí y cumplid vuestra parte del pacto que Yo cumpliré la Mía, y temedme sólo a Mí. Y creed en lo que he revelado confirmando lo que ya teníais. No seáis los primeros en negarlo. Y no vendáis Mis signos a bajo precio y tenedme en cuenta sólo a Mí.

No disfracéis la verdad con falsedad, para ocultarla, después de lo que sabéis.

Estableced el salat, entregad el zakat e inclinaos con los que se inclinan. ¿Cómo es que ordenáis a los hombres la virtud y olvidáis incluiros a vosotros mismos que recitáis el Libro? ¿Es que no váis a entender?

Buscad ayuda en la constancia y en el salat, porque éste no es un peso para los humildes. Los que creen con certeza que encontrarán a su Señor y que a El han de volver.” (2.40-46).

Y:

“¡Hijos de Israel! Recordad los beneficios con los que os favorecí y cómo os preferí por encima de todos los mundos. Y guardaos de un día en el que nadie le sirva nada de lo que haya hecho otro, ni se le acepte ningún precio, ni haya intercesión que valga, ni auxilio.” (2.122-123).

A lo que se refiere a los Judíos que rehusaron aceptar el Islam, el resultado de sus acciones es el mismo que siempre ha sido:

“Y en verdad que Allah exigió la alianza a los hijos de Israel. Y de ellos erigimos a doce jefes de tribu. Y dijo Allah: Yo estoy con vosotros. Sí establecéis el salat, entregáis el zakat*, creéis en Mis mensajeros y estáis con ellos y le hacéis a Allah un hermoso préstamo...

Tened por cierto que ocultaremos vuestras malas acciones y os introduciré en jardines por los que corren los ríos. Y quien de vosotros, después de esto, reniegue, se habrá extraviado del camino llano.

*[Debe entenderse que el salat y el zakat mencionados en esta aleya no se corresponden a la Oración prescrita y la purificación de la riqueza en la forma última que toman en la Ley Revelada del Islam, aunque tenían el mismo significado].

Y porque rompieron su compromiso los maldijimos y endurecimos sus corazones. Tergiversaron las palabras y olvidaron parte de lo que con ellas se les recordaba. No cesarás de descubrir traiciones por su parte, a excepción de unos pocos, pero perdónalos y no se lo tomes en cuenta; es cierto que Allah ama a los que hacen el bien.” (5.12-13).

Y:

“Algunos de los que practican el judaísmo tergiversan las palabras* y dicen: ¡Oímos y desobedecemos! ¡Raina!* Dándole un doble sentido con sus lenguas y ofendiendo la Práctica de Adoración.

Si dijeran: ¡Oímos y obedecemos! ¡Oye! ¡Míranos! Sería mejor para ellos y más justo: pero Allah los maldice por su incredulidad. Son pocos los que creen.” (4.46)

*[De la Torá]

El significado del este ayah se puede entender solamente si el lector conoce el hecho que los Judíos solían intencionalmente a pronunciar mal la palabra Arabe ‘ra'ina', que significa ‘escúchanos' y la cual suena parecido a un insulto en el Hebreo. (Los Musulmanes solían usar esta palabra como terminó de respeto para atraer a la atención del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz). Es por esta razón que Allah le dice a los Musulmanes en Surat al-Baqara que no digan ‘ra'ina', si no que digan ‘andhurna', que significa ‘venos', porque esta palabra no se parece a un insulto en Hebreo si es mal pronunciado:

“¡Vosotros que creéis! No digáis: “Raina”, decid mejor: “Espéranos” y prestad atención. Los que se niegan a creer, tendrán un doloroso castigo.” (2.104).

Otra de las favoritas malas pronunciaciones intencionales de los Judíos en los tiempos del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, era saludarlo a él y a los Musulmanes diciendo, ‘as-samu alaikum', que significa ‘la muerte para ti', (en vez de usar el saludo Musulman, ‘as-salaamu alaikum', que significa ‘la paz sea contigo'), lo cual (el insulto) era contestado con, ‘wa alaikum', que significa ‘¡Lo mismo sea para ti!' (Muslim).

Fue en conexión a esta practica de los Judíos que la siguiente ayah fue revelada:

“¿Qué te parecen ésos a los que se les había prohibido hablar en secreto y sin embargo volvieron a hacer lo que se les había prohibido, haciéndolo con maldad, enemistad y rebeldía contra el Mensajero?

Y cuando vinieron a ti con un saludo que no es el que Allah te da, diciendo para sus adentros: ¿Por qué no nos castiga Allah por lo que decimos? Yahannam bastará para ellos; en él se abrasarán. ¡Qué mal lugar de destino!” (58.8).

Ha sido relatado que los Judíos trataban de estornudar en la presencia del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, esperando que contestara, ‘¡Que Allah te tenga misericordia!' – lo cual era lo que decía cuando un Musulmán estornudaba en su presencia – pero en vez de eso solía decirles, ‘¡Que Allah te guíe y que te de salud felicidad y prosperidad!' (Abu Da'ud).

Los Judíos que se burlaban del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, y quienes se rehusaban a tomarlo en serio eran una fuente de pena para él, aunque Allah lo ordeno que no permitiera que su comportamiento de ellos lo molestara:

“¡Mensajero! Que no te entristezcan aquéllos que se precipitan a la incredulidad, de entre los que dicen con la boca “creemos” pero no creen sus corazones, y los que siguen el judaísmo.

Prestan oídos a la mentira y escuchan a otros que no vienen a ti. Tergiversan las palabras diciendo: Si se juzga de esta manera tomadlo, pero si no, rechazadlo.

Y aquel cuya perdición es voluntad de Allah, tu no tienes nada que hacer por él ante Allah. Esos son aquéllos cuyos corazones Allah no quiere que se purifiquen. En esta vida tendrán humillación y en la Ultima un castigo inmenso.

Prestan oído a la mentira y se comen la ganancia ilícita. Si vienen a ti, juzga entre ellos o abstente de intervenir. Si te abstienes, no te perjudicarán en absoluto; y si juzgas, hazlo con ecuanimidad. Es cierto que Allah ama a los ecuánimes.

¿Y cómo van a delegar en ti el juicio, si tienen la Torá en el que está el juicio de Allah y, a pesar de ello, se desentienden? Esos no son los creyentes.

Es cierto que hicimos descender la Torá, en el que hay guía y luz. Con ella emitían juicios los profetas, aquéllos que se sometieron, así como los rabinos y doctores para los que practicaban el judaísmo; siguiendo el mandato de proteger el libro de Allah, del que eran garantes con su testimonio.

Y no temáis a los hombres, temedme a Mí, ni vedáis Mis signos a bajo precio. Aquel que no juzgue según lo que Allah ha hecho descender... Esos son los incrédulos.

En ella les prescribimos: Persona por persona, ojo por ojo, nariz por nariz, oreja por oreja, diente por diente; y por las heridas un castigo compensado. Quien renuncie por generosidad* , le servirá de remisión. Quien no juzgue según lo que Allah ha hecho descender... Esos son los injustos.

*[A su derecho de exigir el talión]

E hicimos que tras ellos, siguiendo sus huellas, viniera Isa, hijo de Maryam, confirmando aquello que ya estaba en el Torá. Y le dimos el Inyil en el que había guía, luz y una confirmación de lo que ya estaba en la Torá, así como guía y amonestación para los temerosos.

Que la gente del Inyil juzgue según lo que Allah ha hecho descender en él. Quien no juzgue según lo que Allah ha hecho descender... Esos son los descarriados.

E hicimos que te descendiera el Libro con la verdad, como confirmación de lo que había en el Libro y para preservarlo; así pues, juzga entre ellos según lo que Allah ha hecho 

descender, y no sigas sus deseos en contra de la verdad que te ha vendido.

A cada uno de vosotros le hemos asignado un camino y un método propios. Si Allah hubiera querido habría hecho de vosotros una única comunidad; sin embargo lo ha hecho así para ponerlos a prueba en lo que os ha dado. Y competid en las buenas acciones. Todo habéis de volver a Allah que os hará saber lo que no estábais de acuerdo.

Juzga entre ellos según lo que Allah ha hecho descender, no sigas sus deseos y ten cuidado con ellos, no sea que te desvíen de algo que Allah te ha hecho descender. Y si se apartan... Allah quiere afligirlos a causa de algunas de sus faltas. Realmente muchos de los hombres están descarriados.

¿Acaso quieren que se juzgue con el juicio de la ignorancia*? ¿Y qué mejor juez sino Allah, para los que saben con certeza?”

*[En árabe “yahiliya” que define el estado de ignorancia previo al Islam]. (5.41-50).

Estos ayat que acabamos fueron revelados después de un incidente en el cual llegaron algunos Judíos con el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, y le pidieron que juzgara a dos Judíos que estaban casados (el hombre y la mujer no estaban casados entre ellos si no que tenían a su esposo y esposa aparte) y habían cometido el adulterio el uno con la otra.

Ha sido transmitido por Abu Hurayra que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, les dijo, ‘¿Les pido que juren por Allah Quien le reveló el Taurah a Musa, qué es lo que dice el Taurah sobre una persona casada que comete el adulterio?' Ellos contestaron, ‘Se les pinta con carbón, y luego son llevados entre la gente sobre un burro amarados con la espalda del uno con la otra, y luego son azotados.'

Un hombre joven que estaba entre ellos se quedo callado, y cuando el Profeta Muhammad enérgicamente le pidió que jurara por Allah, el contesto, ‘Por Allah, ya que no has pedido que juremos, el Taurah dice que deben ser lapidados hasta la muerte.'

Cuando el Profeta Muhammad le pregunto cuando fue que los Judíos habían hecho más ligero el castigo, él contesto, ‘Un pariente de un cierto rey entre nuestros reyes cometió el adulterio, pero les suspendió el ser lapidados. Luego un hombre de una familia entre la gente común cometió el adulterio, y el rey iba a ordenar que fuera lapidado – pero su gente se quejo y dijeron, “Nuestro hombre no debe de ser lapidado hasta que traigan a su hombre para ser lapidado.” Entonces se pusieron de acuerdo con lo que los iban a castigar.'

Luego el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, les dijo, ‘Voy a decidir el caso conforme lo que dice el Taurah,' y los dos Judíos fueron lapidados a muerte.' (Abu Da'ud).

El mismo incidente o uno similar es descrito en Al-Muwatta' de Imam Malik:

Malik me relato de Nafi' que ‘Abdulah ibn ‘Umar dijo, ‘Los Judíos llegaron con el Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que le dé paz, y le comentaron que un hombre y una mujer entre ellos habían cometido el adulterio.

‘El Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que le dé paz, les pregunto, “¿Qué encuentran en el Torah sobre lapidar?” Ellos dijeron, “Damos a conocer su mala acción y luego los azotamos.” ‘Abdulah ibn Salam dijo, “¡Han mentido! Dice que deben ser lapidados, traigan el Torah.” Abrieron el Torah y uno de ellos puso su mano sobre el ayat que decía que el castigo es lapidar. Luego leyó lo que venia antes y después de este ayat. ‘Abdulah ibn Salam le dijo que levantara su mano. Levanto la mano y allí estaba el ayat de lapidar. Ellos dijeron, “Ha hablado la verdad, Muhammad. El ayat de lapidar esta en el Torah.” Entonces el Mensajero de Allah, que Allah lo bendiga y que le dé paz, dio la orden y fueron lapidados.'

‘Abdulah ibn ‘Umar agrego, ‘Vi al hombre tratando de proteger a la mujer de las piedras.' (Al-Muwatta de Imam Malik: 41.1.1).

Los siguientes ayat que se refieren a dar juicio de acuerdo con lo que Allah ha revelado se encuentran en Surat al-An'am:

“¿Por qué habría de desear a otro juez que Allah cuando es El Quien ha hecho descender para vosotros el Libro clarificador?

Aquéllos a los que les fue dado el Libro saben que éste ha descendido de tu Señor con la verdad; no seas, pues, de los que dudan.” (6.114).

El Corán también habla sobre algunas de las leyes dietéticas de los Judíos:

“Antes de que se hiciera descender la Torá, todos los alimentos eran lícitos para los hijos de Israel salvo los que el propio Israel se prohibió a si mismo. Di: ¡Si es verdad lo que decís, traed la Torá y recitadla

El que inventa la mentira contra Allah después de eso... Esos son los injustos.

Di: Allah ha dicho la verdad, seguid pues la religión de Ibrahim, que era hanif y no de los que asocian.” (3.93-95).

Y:

“A los que siguen el judaísmo les hicimos ilícito todo lo que tuviera uñas, así como la grasa del ganado bovino y ovino, a excepción de la que tuvieran en el lomo, en las entrañas o mezclada con los huesos. Así es como les pagamos por su rebeldía. Decimos la verdad.

Y si tachan de mentira lo que dices, di: Vuestro Señor posee una gran misericordia, pero Su violencia no será apartada de los que hacen el mal.” (16.118).

Y:

“A los judíos les hicimos ilícito lo que te hemos relatado anteriormente y no fuimos injustos con ellos, sino que ellos mismos fueron injustos consigo mismos.” (16.118).

Ha sido relatado que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, una vez dijo, ‘¡Qué Allah condene a los Judíos! Tenían prohibido comer grasa, entonces lo vendieron y comían de las ganancias de su venta.' (Al-Muwatta de Imam Malik: 49.10.26). En el Corán Allah reprende severamente a los Judíos por acusar a Allah por lo que era su propia culpa:

“Dicen los judíos: La mano de Allah está cerrada.

¡Que se cierren las suyas y sean malditos por lo que dicen!

Por el contrarío Sus dos manos están abiertas, (extendidas), y gasta como quiere. Lo que tu Señor ha hecho que descendiera, a muchos de ellos les aumentará en rebeldía e incredulidad.

Hemos sembrado entre ellos la enemistad y la ira hasta el Día del Levantamiento. Cada vez que enciendan un fuego para la guerra, Allah lo apagará. Se afanan por corromper en la tierra, pero Allah no ama a los corruptores.” (5.64).

Y:

“Y así fue como Allah oyó la palabra de quienes dijeron: Allah es pobre y nosotros somos ricos. Escribiremos lo que dijeron y que mataron a los profetas sin razón, y diremos: ¡Gustad el castigo del Hariq!*

[Esta aleya descendió en relación a un grupo de judíos que cuando fueron reveladas las palabras: “¿Quién le ofrecerá a Allah un préstamo generoso?” Reaccionaron diciendo: “Es el pobre el que pide préstamos al rico”.]

Eso (será) por lo que sus manos hayan presentado y porque Allah no es en absoluto injusto con sus siervos.

Son) los que dijeron: Allah pactó con nosotros que no creyéramos en ningún mensajero hasta que no nos trajera una ofrenda que el fuego consumiera. Di: Antes de mí ya vinieron a vosotros mensajeros con las pruebas evidentes y con lo que habéis dicho. Si decís la verdad, ¿Por qué entonces los matásteis?

Y si dicen que mientes... Ya dijeron lo mismo de mensajeros anteriores a ti que habían venido con las pruebas evidentes, las Escrituras y el Libro luminoso.” (3.181-184).

Ha sido transmitido por ‘Abdulah ibn Mas'ud que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, dijo, ‘El primer defecto que se impregno entre la Tribu de Israel fue que uno de ellos se encontró con otro de ellos y dijo, “Oh tal-y-tal, ten taqwa de Allah y deja lo que estas haciendo, porque no es halal para ti.” Luego se encontró con él el día siguiente y no se rehuso en comer con él, beber con él y sentarse con él – y cuando hicieron esto, sus corazones se mezclaron el uno con el otro.' Luego recito el siguiente ayat:

“Los hijos de Israel que cayeron en la incredulidad fueron maldecidos por boca de Daud y de Isa, hijo de Maryam. Esto les pasó porque desobedecieron y fueron más allá de los límites.

No se impedían entre ellos ninguna acción reprobable. ¡Qué malo es lo que hacían!

Ves a muchos de ellos intimar con los incrédulos. ¡Que malo es lo que sus almas han preparado! Allah se ha enojado con ellos y serán inmortales en el castigo.

Si creyeran en Allah, en el Profeta y en lo que se les ha hecho descender no los tomarían como aliados, sin embargo muchos de ellos están fuera del camino.” (5.78-81).

Luego dijo él, ¡Realmente!- ¡Juro por Allah, deben de ordenar lo que es bueno y prohibir lo que es malo, y detén a quienquiera que haga lo malo, y hazlo hacer lo que es correcto, y limítalo en hacer lo que esta permitido!' (Abu Da'ud).

Allah dice en el siguiente ayah:

“Y seguro que encontrarás que la gente con enemistad más fuerte hacia los que creen son los judíos y los que asocian; mientras que encontrarás los que están más próximos en afecto a los que creen, son los que dicen: Somos cristianos. Eso es porque entre ellos hay sacerdotes y monjes y no son soberbios.” (5.82)

Los Cristianos

Como acabamos de ver, Allah describe a los Cristianos así:

“Y seguro que encontrarás que la gente con enemistad más fuerte hacia los que creen son los judíos y los que asocian; mientras que encontrarás que los que están más próximos en afecto a los que creen, son los que dicen: Somos Cristianos. Eso es porque entre ellos hay sacerdotes y monjes y no son soberbios.

Cuando oyen lo que se le ha hecho descender al Mensajero, ves sus ojos inundados de lágrimas por la verdad que reconocen y dicen: ¡Señor nuestro! Creemos, escribe nuestros nombres con los que dan testimonio.

¿Por qué no íbamos a creer en Allah y en la verdad que nos ha llegado si ansiamos que nuestro Señor nos haga entrar en la compañía de los justos?

Allah los recompensará por lo que dicen con jardines por cuyo suelo corren los ríos, donde serán inmortales. Esa es la recompensa de los bienhechores.

Y los que se niegan a creer y tachan de mentira Nuestros signos, ésos son los compañeros del Yahim.” (5.82-86).

Mientras que Allah reprimenda severamente a los Judíos por deliberadamente esconder y cambiar lo que le fue originalmente revelado a sayyedina Musa, la paz sea con él, a lo que se refiere de los Cristianos, Allah simplemente les señala que han olvidado parte de lo que originalmente le fue revelado a sayyedina ‘Isa, la paz sea con él:

“Y a algunos de los que dicen: Somos cristianos, les exigimos la alianza, sin embargo olvidaron parte de lo que se les recordaba en ella y sembramos la enemistad y el odió entre ellos hasta el Día del Levantamiento. Ya les hará saber Allah lo que hicieron.” (5.14).

El Corán hace claro, sin embargo, que los Cristianos que rehusan aceptar el Islam son más cercanos a los Judíos que a los Musulmanes, y Allah le advierte a los Musulmanes no tomarlos como amigos:

“Los judíos y los cristianos no estarán satisfechos contigo hasta que no sigas sus creencias. Di: La guía de Allah es la Guía. Si siguieras sus deseos después del conocimiento que te ha venido, no tendrías ante Allah quien te protegiera ni auxiliara.

Aquéllos a quienes dimos el Libro y lo leen como debe ser leído, creen en él: pero los que niegan, esos son los perdidos.” (2.120-121).

Y:

“¡Vosotros que creéis! No toméis por aliados a los judíos ni a los cristianos; unos son aliados de otros. Es cierto que Allah no guía a los injustos.

Ves cómo los que tienen una enfermedad en el corazón van a ellos corriendo y dicen: Tememos que la suerte nos sea adversa. Pero puede ser que Allah te traiga la victoria o una orden Suya y entonces tengan que arrepentirse de lo que guardaron secretamente en sus corazones.

Los que creen dicen: ¿Son éstos quienes juraron por Allah con la máxima solemnidad en sus juramentos que estarían con vosotros? Sus obras serán inútiles y perderán.” (5.51-53).

Y:

“¡Vosotros que creéis! No toméis como amigos aliados a aquéllos de los que recibieron el Libro antes que vosotros y de los incrédulos que tomen vuestra Práctica de Adoración a burla y juego. Y temed a Allah, si sois creyentes.

Cuando llamáis al salat lo toman a burla y juego. Eso es porque son gente que no comprende. (5.57- 58).

Y:

¡Vosotros que creéis! No toméis por amigos de confianza a quienes no sean de los vuestros, porque no cejarán en el empeño de corromperos; desean vuestro mal. La ira asoma por sus bocas, pero lo que ocultan sus pechos es aún peor. Y se razonáis, ya se os han aclarado los signos...

¿Pero cómo es que vosotros, que creéis en todos los libros revelados, los amáis mientras que ellos no os aman?

Cuando se encuentran con vosotros dicen: Creemos. Pero cuando están a solas se muerden los dedos de rabia contra vosotros. Di: ¡Morid con vuestra rabia!

Si os llega un bien, les duele, y si os sobreviene un mal, se alegran por ello; pero si tenéis paciencia y sois temerosos, su intriga no os dañará en absoluto; es cierto que Allah rodea lo que hacen.” (3.118-120).

El Corán hace claro que el error más grande de los Cristianos ha sido elevar a sayyedina ‘Isa, la paz sea con él, mucho más allá que su nivel de Mensajero y Profeta, equivocadamente creyéndolo el ‘hijo' de Dios:

“Y dicen: Allah ha tomado para sí un hijo. ¡Sea glorificado por encima de eso! ¡Si suyo es cuanto hay en los cielos y la tierra y todos están sometidos a El!

Aquel que dio principio a los cielos y la tierra. Cuando decreta algo, le basta con decir: ¡Sé! Y es.” (2.116-117).

Y:

“Han caído en incredulidad los que dicen que Allah es el Ungido, hijo de Maryam.

Di: ¿Y si Allah quisiera destruir al Ungido, hijo de Maryam, a su madre y a cuantos hay en la tierra, todos a la vez? ¡Quién podría impedírselo? De Allah es el Dominio de los cielos y de la tierra y de lo que hay entre ambos. Crea lo que quiere, Allah es Poderoso sobre todas las cosas.

Y dicen los judíos y los cristianos: Nosotros somos hijos de Allah y los más amados por El.

Di: ¿Por qué entonces os castiga a causa de vuestras transgresiones? Sólo sois unos entre los hombres que ha creado. Perdona a quien quiere y castiga a quien quiere. De Allah es el Dominio de los cielos y de la tierra y de lo que hay entre ambos. A El se ha de volver.” (5.17-18).

Y:

“Realmente han caído en incredulidad quienes dicen: Allah es el Ungido, hijo de Maryam. Cuando fue el Ungido quien dijo a los hijos de Israel: ¡Adorad a Allah! Mi Señor y el vuestro.

Quien asocie algo con Allah, Allah le vedará el Jardín y su refugio será el Fuego. No hay quien auxilie a los injustos.

Y han caído en incredulidad los que dicen: Allah es el tercero de tres, cuando no hay sino un Unico Dios. Si no dejan de decir lo que dicen, ésos que han caído en la incredulidad tendrán un castigo doloroso.

¿Es que no van a volverse hacia Allah y Le van a pedir perdón? Allah es Perdonador y Compasivo.” (5.72-74).

Y:

“¡Gente del Libro! No saquéis las cosas de quicio en vuestra Práctica de Adoración ni digáis sobre Allah nada que no sea la verdad.

Ciertamente el Ungido, hijo de Maryam, es el mensajero de Allah, Su palabra depositada en Maryam y un espíritu procedente de El. Creed, pues, en Allah y en Su Mensajero y no digáis tres; es mejor para vosotros que desistáis. La verdad es que Allah es un Dios Unico.

¡Está muy por encima en Su gloria de tener un hijo! Suyo es cuanto hay en los cielos y cuanto hay en la tierra. Y Allah basta como Guardián.” (4.171).

Y:

“Allah no ha tomado hijo alguno ni hay con El ningún dios. Porque si así fuera cada dios se llevaría lo que hubiera creado y se dominarían unos a otros. ¡Ensalzado sea Allah por encima de lo que Le puedan atribuir!

El conoce el No-Visto y lo Aparente, sea ensalzado por encima de lo que Le asocian.” (23.91-92).

Y:

“¿Acaso no se Le debe a Allah la Adoración exculsiva?

Los que han tomado protectores fuera de El, (dicen):Sólo los adoramos para que nos den proximidad a Allah. Allah juzgará entre ellos sobre aquello en lo que tenían diferencias. Allah no guía a quien es mentiroso e ingrato.

Si Allah hubiera querido tomar para Sí un hijo, habría escogido lo que hubiera querido de entre Su creación.

El es Allah, el Uno, el Dominante. ¡Glorificado sea!” (39.3-4).

Y:

“Di: Si el Misericordioso tuviera un hijo, yo sería entonces el primero de los adoradores.

¡Gloría al Señor de los cielos y de la tierra, el Señor del Trono por encima de lo que lo atribuyen!” (43.81-82)

Y:

“Y si les preguntas: ¿Quién creó los cielos y la tierra? Dirán: Allah.

Di: Decidme qué os parece: Si Allah quiere que sufra yo algún daño, ¿acaso aquéllos que invocáis fuera de Allah podrían evitar Su daño? ¿Oh si quiere que reciba alguna misericordia?

¿Podrían ellos impedir Su misericordia? Di: Allah me basta, en El se abandonan los que confían.” (39.38).

“Di: ¿Me mandáis que adore a otro que Allah, oh ignorantes?” (39.64).

Y:

“¡Bendito sea Aquel que ha hecho descender a Su siervo el Discernimiento para que fuera una advertencia a todos los mundos! Aquel a Quien pertenece la soberanía de los cielos y la tierra y no ha tomado ningún hijo ni comparte la soberanía con nadie. El ha creado cada cosa y la ha determinado en todo. Pero habéis tomado dioses fuera de El que no crean nada, ellos son creados; ni tienen capacidad para dañarse o beneficiarse no tienen sobre la vida, la muerta y el resurgimiento. (25.1-3).

Y:

“Y dicen: El Misericordioso ha tomado un hijo.

Ciertamente traéis una calamidad. A punto están los cielos de rasgarse, la tierra de abrirse y las montañas de derrumbarse por su causa. Porque atribuyen un hijo al Misericordioso.

Y no es propio del Misericordioso tomar un hijo. Todos los que están en los cielos y en la tierra no se presentan ante el Misericordioso sino como siervos.

Y es verdad que El conoce su número y los tiene bien contados. Todos vendrán a El por separado el Día del Levantamiento.” (19.88-95).

Y:

“Antes de ti no enviamos ningún mensajero al que no fuera inspirado: No hay dios excepto Yo. ¡Adoradme!

Han dicho: El Misericordioso ha tomado un hijo. ¡Sea glorificado! Por el contrario son siervos distinguidos. No se Le adelantan en la palabra y actúan siguiendo lo que les manda.

Sabe lo que tienen delante y lo que tienen detrás. Sólo quien es aceptado puede interceder por ellos. Y están temerosos por miedo a El.

Y quien de ellos diga: ‘Yo soy un dios aparte de El... A ése le pagaremos con Yahannam. Así es como pagamos a los injustos.”

Y:

“Dicen: Allah ha tomado para Sí un hijo. ¡Lejos de eso en Su gloria! El es el Rico, Suyo es cuanto hay en los cielos y en la tierra. No tenéis ninguna prueba de lo que decís: ¿Es que vais a decir sobre Allah lo que no sabéis?

Di: Es cierto que los que inventan la mentira sobre Allah no prosperan. Un disfrute en este mundo, y después tendrán su regreso a Nosotros; y luego les haremos probar el duro castigo por haber negado.” ((10.68-70).

Por lo tanto en los primeros ayat de Surat al-Kahf, Allah dice que una de las razones por los cuales fue revelado el Corán ha sido para advertir a los que dicen que Allah tiene un hijo:

“Las alabanzas a Allah que ha hecho descender a Su siervo el Libro y no puesto en él nada que fuera tortuoso.

Sino que es directo para advertir de una gran violencia de Su parte y anunciar a los creyentes, ésos que practican las acciones de rectitud, que tendrán una hermosa recompensa, permaneciendo en ello para siempre.

Y para advertir a los que dicen: Allah ha tomado para Sí un hijo. Ni ellos ni sus padres tienen conocimiento de eso, es una palabra grave que sale de sus bocas. Lo que dicen es sólo una mentira.” (18.1-5).

Porque:

“No es propio de Allah tomar ningún hijo. ¡Gloria a El! Cuando dice algo, sólo dice Sea, y es.” (19.35).

Y:

“¡Hombres! Se os pone un ejemplo, prestadle atención: Los que invocáis fuera de Allah no serían capaces ni de crear una mosca, aunque se juntaran para ello. Y si una mosca les quitara algo no podrían recuperarlo. ¡Qué débil buscador y qué débil buscado!”

Por lo tanto, Allah le dice a los Musulmanes que decirles a los Cristianos que buscan discutir con ellos sobre sayyedina ‘Isa, la paz sea con él:

“Verdaderamente Isa, ante Allah, es como Adan. Lo creó de tierra y luego le dijo: ¡Sé! Y fue.

(Esto es) la verdad procedente de tu Señor, no seas de los que dudan.

Y a quien, después del conocimiento que te ha venido, te discuta sobre él, dile: Venid, llamemos a nuestros hijos y a los vuestros, a nuestras mujeres y a las vuestras y llamémonos a nosotros todos y luego pidamos y hagamos que la maldición de Allah caiga sobre los mentirosos.” (3.59-61).

Es interesante, a lo que se refiere de estos últimos ayat, el considerar un pasaje de Ash-Shifa' de Qadi ‘Iyad, la cual es tomada de la sección sobre la inimitabilidad del Corán y en el cual existe un descripción de lo que paso cuando llegaron los obispos Cristianos de Najran, en Yemen, a Madina para visitar a sayyedina Muhammad, que Allah lo bendiga y que le paz, en el año 10 AH.

Cuando los obispos de Najran llegaron con él y rechazaron el Islam, Allah mando a descender los ayah de mutua maldición sobre ellos diciendo, “Y a quien, después del conocimiento que te ha venido, te discuta sobre él, dile: Venid, llamemos a nuestros hijos y a los vuestros, a nuestras mujeres y a las vuestras y llamémonos a nosotros todos y luego pidamos y hagamos que la maldición de Allah caiga sobre los mentirosos.” (3:61).

No los dejaron hacer esto y fueron satisfechos con pagar el impuesto de jizya. No los dejaron porque su líder al-‘Aqib, le dijo a los obispos, “Saben que es un Profeta. Un Profeta nunca condena a una gente sin que no lleguen a sobrevivir su gente común y su gente grande.”

Es lo mismo cuando Allah dice, ‘Y si tenéis alguna duda sobre lo que hemos revelado a Nuestro siervo,

venid vosotros con una sura igual; y si decís la verdad, llamad a esos testigos que tenéis en vez de Allah. Mas si no lo hacéis, que no lo haréis, temed al Fuego cuyo combustible son los hombres y las piedras, preparado para los incrédulos.' (2.24)

Allah le dijo a los Arabes que no lo harían y de hecho no lo hicieron. Este ayah es uno de los reportes sobre lo No Visto, pero también contiene su incapacidad de ellos de responder al reto al principio del ayah. (Ash-Shifa de Qadi ‘Iyad: 1.4.8).

Desde los tiempos del Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, a nuestros tiempos, ningún Judío a deseado la muerte, ningún Cristiano a invocado la maldición mutua, y nadie a podido componer una surah cómo una de las surahs del Corán, de los cuales el mas pequeño, Surat al-Kawthar, tiene solamente diez palabras.

LA GENTE DEL LIBRO

Dirigiéndose a la Gente del Libro, Allah dice:

“¡Vosotros que habéis recibido el Libro! ¡Creed en lo que hemos hecho descender, que es una confirmación de lo que ya teníais, antes de que os borremos las facciones de la cara y la pongamos del revés u os maldigamos como maldijimos a la gente del sábado. El mandato de Allah está hecho.

Es cierto que Allah no perdona que se Le asocie con nada, pero, fuera de eso, perdona a quien quiere. Y quien atribuya asociados a Allah, habrá forjado una falsedad incurriendo en un enorme delito...

¿No has visto a los que se consideran a sí mismos puros? Sin embargo Allah purifica a quien quiere. No se les hará ni una brizna de injusticia*

*[Lit. no se les hará injusticia ni en el filamento de la ranura de un hueso de dátil.]

Mira cómo inventan mentiras sobre Allah. Ni hace falta un delito más evidente. ¿Acaso no has visto a los que se les dio parte del Libro cómo creen en al-Yibt y al-Tagut* y dicen de los que niegan la creencia: estos tienen mejor guía en su camino que los que creen?

*[Al-Yibt y al-Tagut designan a dos ídolos y en general representan a todo aquello que se adore en lugar de Allah. Según Umar ibn al-Jattab, al-Yibt es la magia y al-Tagut es Shaytán.]

A ésos Allah los ha maldecido y al que Allah maldice no encontrarás quien le auxilie. ¿Es que acaso poseen algo de Soberanía? Si fuera así, no les darían a los hombres ni un hueso de dátil.

¿O, por el contrario, sienten envidia de los hombres por lo que Allah les ha dado de Su favor? A los descendientes de Ibrahim les dimos el Libro y la Sabiduría y les dimos un gran dominio. Entre ellos, algunos creen en él y otros se apartan. Yahannam les bastará como fuego abrasador.

A los que se hayan negado a creer en Nuestros signos, los arrojaremos a un Fuego, y cada vez que les queme la piel, se la cambiaremos por otra, para que prueben el castigo. Allah es siempre Irresistible, Sabio.

Y a los que creen y practican las acciones de bien, les haremos entrar en jardines por cuyo suelo corren los ríos; allí serán inmortales para siempre, tendrán esposas puras y les pondremos al amparo de una apacible umbría.” (4.47-57)

. Describiendo el Fuego, Allah confirma que hay diecinueve ángeles en cargo de él – un hecho que sólo los que tenían acceso a revelaciones anteriores como el Taurah y el Ingil sabrían: “

¿Y cómo sabrá qué es Saqar*?

*[Nombre del sexto nivel de Yahannam. La palabra tiene que ver con la quemazón del sol en la cara y la insolación.]

No deja nada ni cesa. Abrasa la piel. Sobre él hay diecinueve* .

*[Ángeles].

No hemos designado como encargados del Fuego sino a ángeles cuyo número hemos hecho una tribulación para los que se niegan a creer. Para aquéllos a los que les fue dado el Libro tengan certeza y los que creen aumenten en creencia y para los que recibieron el Libro y los creyentes no duden. Y para que los que tienen una enfermedad en el corazón y los incrédulos digan: ¿Qué pretende Allah poniendo este ejemplo?

Así es como Allah extravía a quien quiere y guía a quien quiere y sólo tu Señor conoce Sus ejército, que no son sino un recuerdo para el género humano.” (74.27-31).

Allah le promete a los que son sinceros en sus acciones de la Gente del Libro que no tendrán nada que temer:

“Es cierto que aquéllos que han creído y los judíos, sabeos y cristianos que crean en Allah y en el Ultimo Día y obren con rectitud, no tendrán que temer ni se entristecerán.” (5.69).

Y que recibirán su debida recompensa:

“Cierto que los que han creído, los que siguen el judaísmo, los cristianos y los sabeos, si creen en Allah y en el Ultimo Día y actúan rectamente, tendrán su recompensa ante su Señor y no tendrán que temer ni se entristecerán.” (2.62).

Y que Allah juzgara entre ellos en el Ultimo Día:

“Los que creen, los que practican el judaísmo, los sabeos, los cristianos, los adoradores del fuego y los que asocian... Allah hará distinciones entre ellos el Día del Levantamiento, realmente Allah es Testigo de cada cosa.” (22.17).

Y dirigiéndose a los Musulmanes, Allah dice:

“Sois la mejor comunidad que ha surgido en bien de los hombres. Ordenáis lo reconocido, impedís lo reprobable y creéis en Allah.

Y a la gente del Libro más les valdría creer. Los hay creyentes, pero la mayoría se han salido del camino.

No os harán ningún daño aparte de alguna molestia, y si combaten contra vosotros, volverán la espalda ante vuestra presencia. Y luego no se les prestará auxilio.

Donde quiera que se encuentren tendrán que soportar la humillación, a menos que hayan hecho algún pacto con Allah o con los hombres. Se ganaron la ira de Allah y se les impuso el yugo de la mezquindad. Porque negaron a los signos de Allah y mataron a los profetas sin razón; y porque desobedecieron y fueron transgresores.

No todos los de la gente del Libro son iguales, los hay que forman una comunidad recta: recitan los signos de Allah durante la noche y se postran.

Creen en Allah y en el Ultimo Día, ordenan lo reconocido e impiden lo reprobable y compiten en las acciones de bien. Esos son los justos.

Y el bien que hagáis... No se os negará. Allah conoce a los que Le temen.” (3.110-115).

Y:

“Entre la gente del Libro hay quien cree en Allah, así como en lo que se os ha hecho descender a ellos, son humildes ante Allah y no venden los signos de Allah a bajo precio. Esos tendrán la recompensa que les corresponda ante su Señor; ciertamente Allah es Rápido en tomar cuenta de las acciones.” (3.199).

Y:

“Los que recibieron el Libro antes, creen en él. Y cuando se les lee, dicen: Creemos en él, es la verdad que procede de nuestro Señor; realmente ya éramos musulmanes.

Esos recibirán su recompensa dos veces por haber sido pacientes, por haber rechazado el mal con el bien y haber gastado de la provisión que les dábamos.

Y porque cuando oían alguna palabra vana se apartaban de ella y decían: Para nosotros serán nuestras acciones y para vosotros las vuestras. Paz con vosotros, no buscamos a los ignorantes.” (28.52-55).

Y:

“¡Vosotros que creéis! Temed a Allah y creed en Su mensajero y os dará de Su misericordia doblemente, os conferirá una luz con la que caminaréis y os perdonará. Allah es Perdonador, Compasivo.

Para que la gente del Libro sepa que no tiene ningún poder sobre el favor de Allah, sino que el favor está en las manos de Allah y El lo da a quien quiere. Allah es Dueño del inmenso favor.” (57.28- 29).

Y:

“Aquellos a los que hemos dado el Libro se regocijan por lo que se te ha hecho descender, pero algunos de los coligados* niegan parte de él. Di. Sólo se me ha ordenado que adore a Allah y no Le atribuya copartícipes; a El os llamo y a El me vuelvo.

*[Puede referirse a las tribus de los Quraysh, o también a las demás tribus árabes que no aceptaron el Islam; o a los judíos y a los cristianos, puesto que reconocían algunas de las historias mencionadas en el Corán pero no creían en otra parte de él.] ” (13.36).

Y:

Y no discutas con la gente del Libro sino de la mejor manera, a excepción de los que hayan sido injustos* . Y decid: Creemos en lo que os ha hecho descender a vosotros, nuestro Dios y vuestro Dios es Uno y nosotros estamos sometidos a El (Somos musulmanes).

*[Esta aleya esta abrogada por la aleya no. 5 de sura novena, la aleya de la espada, y por lo tanto es anterior al precepto de combatir a los incrédulos].

Y del mismo modo hemos hecho que te descendiera a ti el Libro; de manera que aquéllos a los que les habíamos dado el Libro creen en él y algunos de estos también creen en él. Sólo los que se niegan a creer niegan Nuestros signos.” (29.46-47).

Queda claro en los siguientes ayat, sin embargo, que no todos los Judíos y los Cristianos tienen la misma actitud o grado de entendimiento:

Dicen: Sólo entrará en el Jardín quien sea judío o cristiano. Esas son falsas pretensiones. Di: Se es verdad lo que decís, traed la prueba que lo demuestre.

¡Pero no! Sino que aquel que humille su rostro ante Allah y actué rectamente, no tendrá que temer ni se entristecerá.

Dicen los judíos: Los cristianos no tienen fundamento. Y dicen los cristianos: Los judíos no tienen fundamento.

Pero ambos leen el Libro. También los que no saben dicen algo similar* . Allah juzgará entre ellos el Día del Levantamiento sobre lo que discrepaban.

*[Acerca de Muhammad].

Y

“Y dicen: ¡Tenéis que ser judíos o cristianos! Di: Al contrario, (seguimos) la religión de Ibrahim que era hanif* , y no uno de los asociadores.

*[Hanif significa: El que tiene una inclinación natural hacia la forma de adoración verdadera rechazando toda sumisión a otro que no sea el Unico Dios.]

Decir: Creemos en Allah, en lo que nos ha hecho descender, en lo que se hizo descender a Ibrahim, Ishaq, Yaqub y a las Tribus, en lo que le fue dado a Musa e Isa y en lo que a los profetas procedente de su Señor.

No hacemos distinciones entre ninguno de ellos* y estamos sometidos a El.

*[En cuanto creer en unos sí y en otros no]

Si creen en lo mismo que creéis vosotros, habrán seguido la guía, pero si se apartan de ello... (sabe) que están en contra. Allah te basta contra ellos, El es Quien oye y Quien sabe. El tinte de Allah. ¿Y quién es mejor que Allah tiñendo? Es a El a Quien adoramos.

Di: ¿Acaso nos discutís a Allah, que es tanto vuestro Señor como el nuestro? Lo que hagamos será para nosotros y lo que hagáis será para vosotros. Nosotros somos fieles a El. ¿Dicen acaso que Ibrahim, Ismail, Ishaq, Yaqub y las Tribus fueron judíos o cristianos? Di: ¿Quién sabe más, vosotros o Allah? ¿Y quien es más injusto que quien oculta el testimonio que le viene de Allah? Allah no está inadvertido de lo que hacéis.

Esa es una comunidad que ya pasó, tiene lo que se ganó y vosotros tendréis lo que os ganéis. Y no se pedirán explicaciones de lo que hicieron.” (2.135-141).

Y Allah hace claro que perdona cualquier cosa menos el shirk, lo que es adorar a otros en vez de El:

“Es cierto que Allah no perdona que se Le asocie con nada. Sin embargo, aparte de esto, perdona a quien quiere. Quien asocie algo con Allah, se habrá perdido en un lejano extravío.” (4.116).

Y Allah hace claro que es El Quien decide quien va a ir al Fuego y quien va ir al Jardín:

“A los que creen y practican las acciones de bien, les haremos fácil entrar en jardines por cuyo suelo corren los ríos; allí serán inmortales para siempre. Promesa verdadera de Allah. ¿Y quién es más veraz que Allah en Su palabra?

No se hará según vuestros deseos ni según los deseos de la gente del Libro. Quien haga un mal será pagado por ello y no encontrarás para él, aparte de Allah, nadie que lo proteja ni lo defienda.

Y quien haga acciones de bien, sea varón o hembra, y sea creyente... esos entrarán en el Jardín y no se les hará ni una brizna de injusticia. ¿Y quién es mejor en su practica de Adoración que aquel que ha sometido su rostro a Allah, hace el bien y sigue la religión de Ibrahim como hanif? Y Allah tomó a Ibrahim como amigo íntimo.

De Allah es cuanto hay en los cielos y en la tierra. Allah rodea todas las cosas.” (4.122-126)

Por lo tanto, hace claro el Corán que los Musulmanes no solamente creen en sayyedina Muhammad, que Allah lo bendiga y que le de paz, sino que en todos los Profetas que vinieron antes de él, que las bendiciones y paz de Allah sean con todos ellos, y en El que los envió:

“Di: ¡Gente del Libro! Venid a una palabra común para todos: Adoremos únicamente a Allah, sin asociarle nada y no nos tomemos unos a otros por señores en vez de Allah.

Y si vuelven la espalda, decid: ¡Sed testigos de que somos musulmanes!

Di: ¡Gente del Libro! ¿Por qué disputais sobre Ibrahim, si la Torá y el Inyil no se hicieron descender sino después de él? ¿Es que no razonaréis? Y estáis disputando sobre lo que no sabéis. ¿Por qué disputáis sobre aquello de lo que no tenéis conocimiento? Allah sabe y vosotros no sabéis.

Ibrahim no era ni judío ni cristiano, sino hanif y musulmán. Y no uno de los asociadores.

En verdad los más dignos de (llamar suyo a) Ibrahim, son los que le siguieron, este Profeta y los que creen. Y Allah es Protector de los creyentes. Hay algunos de la gente del Libro que quisieran extraviaros, pero sólo se extravían a sí mismos sin darse cuenta.

¡Gente del Libro! ¿Por qué negáis los signos de Allah si sois testigos de ellos? ¡Gente del Libro! ¿Por qué disfrazáis la verdad de falsedad y ocultáis la verdad a sabiendas?

Una parte de la gente del Libro dijo: Creed en lo que se les ha hecho descender a los que creen sólo al principio del día, pero dejad de creer en ello al final; puede que así desistan. Y no creáis en nadie que no siga vuestra misma forma de Adoración – Di: La guía de Allah es la Guía – ni creáis que se le puede dar a nadie lo que se los ha dado a vosotros, ni que pueda tener pruebas contra vosotros ante vuestro Señor.

Di: El favor está en manos de Allah, y El lo da a quien quiere. Allah es Espléndido y Conocedor.

Distingue con Su misericordia a quien quiere; Allah es poseedor del favor inmenso. De la gente del Libro hay algunos que si les confías una gran cantidad de dinero, te la devuelven, pero otros que aunque les confíes un dinar, sólo te lo devuelven después de pedírselo con insistencia. Eso es porque ellos han dicho: No hay medio de ir contra nosotros por lo que hagamos con los ignorantes* , diciendo una mentira contra Allah a pesar de que saben.

*[El término “ignorantes” es traducción de Ummiyyin que se refiere a los no judíos y equivale a “gentiles”, aunque significa literalmente iletrado o analfabeto. Sobre esta aleya los comentaristas destacan que los judíos pretendían que Allah les había hecho lícita la riqueza de los que no fueran judíos y como consecuencia podían transgredir las leyes con ellos y obtener sus bienes por medios ilegítimos como la usura.]

¡Muy al contrario! Quien cumple su compromiso y es temeroso... Allah ama a los que Le temen.

La verdad es que los que venden el pacto de Allah y sus juramentos a bajo precio, no tendrán parte en la Ultima Vida.

Allah no les hablará ni los mirará el Día del Levantamiento ni los purificará: Tienen un castigo doloroso. Y hay una parte de ellos que tergiversan el Libro con sus lenguas, para que creáis que lo que recitan es parte de él. Pero no es parte del Libro. Dicen: Esto viene de Allah; pero no es cierto que venga de Allah. Dicen una mentira contra Allah, a sabiendas.

No cabe en un ser humano a quien Allah le ha dado el Libro, la Sabiduría y la Profecía, que diga a los hombres: Sed siervos míos en vez de (siervos de) Allah; sino más bien: Sed maestros, puesto que conocéis el Libro y lo habéis estudiado. Y no os ordena que toméis a los profetas como señores. ¿Os iba a ordenar la incredulidad después de haber sido musulmanes?

Y (ten presente) el compromiso que Allah pidió a los profetas: Os damos parte de un Libro y de una Sabiduría, luego vendrá a vosotros un mensajero que confirmará lo que tenéis; en él haréis de creer y le habréis de ayudar. Dijo: ¿Estáis de acuerdo y aceptáis, en estos términos, Mi pacto? Dijeron: Estamos de acuerdo. Dijo: Dad testimonio, que Yo atestiguo con vosotros.

Quien dé la espalda después de eso... Esos son los que se salen del camino.

¿Acaso desearéis algo distinto a la Práctica de Adoración aceptada por Allah, cuando todos los que están en los cielos y en la tierra están sometidos a El, de grado o por fuerza, y a El tenéis que volver?

Di: Creemos en Allah y en lo que se ha hecho descender para nosotros y en lo que se hizo descender sobre Ibrahim, Ismail, Ishaq, Yaqub y las Tribus, así como lo que le fue dado a Musa, a Isa y a los profetas, procedente de su Señor; no excluimos a unos y aceptamos a otros y a El estamos sometidos.

Y quien desee otra práctica de Adoración que no sea el Islam, no le será aceptada y en la Ultima Vida será de los perdedores. ¿Cómo guiará Allah a unos que después de haber creído y de haber atestiguado la verdad del Mensajero y después de haberles llegado las pruebas claras han renegado? Allah no guía a las gentes injustas.

La recompensa de éstos será que la maldición de Allah, la de los ángeles y la de todos los hombres, caerá sobre ellos. Inmortales en ello, no se les aliviará el castigo ni se les aplazará.

Salvo aquellos que se vuelvan atrás arrepentidos y se corrijan, pues en verdad que Allah es Perdonador, Compasivo.” (3.64-89).

El Corán también hace claro como parte de la Gente de Libro prefieren la falsedad a la verdad, esto a pesar de que saben que sus enseñanzas han sido alteradas y que las enseñanzas de sayyedina Muhammad son puras:

“Y ahora que les ha llegado un mensajero de Allah, confirmando lo que ya tenían, hay algunos de los que recibieron el Libro que se desentienden del libro de Allah, dándole la espalda como si no supieran.

Siguen lo que practicaron los demonios en el reinado de Sulayman. Pero no fue Sulayman quien cayó en incredulidad, sino que fueron los demonios al enseñar a los hombres la magia que le había sido revelada a los dos ángeles Harut y Marut en Babil.

Estos no enseñaban a nadie sin antes advertirle: Somos una prueba, no caigas en la incredulidad.

Así aprendieron de ellos cómo separar al hombre de su esposa.* Pero no perjudicaron a nadie sin permiso de Allah. Aprendieron lo que les perjudicaba y no les beneficiaba y ciertamente supieron que quien adquiera ese conocimiento no tendría parte en la Ultima Vida. ¡Qjalá hubieran sabido cuán malo era el precio por el que vendieron sus almas!

*[Transformando el amor en odio]

¡Ojalá hubieran creído, hubieran temido (a Allah) y hubieran sabido que lo que Allah da es mejor!” (2.101-103).

(El significado del pasaje que acabamos de ver se puede interpretar de varías maneras. Vea el comentario de Qadi ‘Iyad que fue citado en el Capitulo Cuatro.”

Y:

“Y cuando Allah exigió en Compromiso a los que habían recibido el Libro: “Lo explicaréis claramente a los hombres y no lo ocultaréis”; pero ellos le dieron la espalda y lo vendieron a bajo precio. ¡Qué malo es lo que adquirieron!

No pienses que los que se regocijan por lo que han hecho y les gusta que se les alabe por lo que no han hecho, están a salvo del castigo, porque no lo están. Tendrán un castigo doloroso.

De Allah es la soberanía de los cielos y la tierra y Allah tiene poder sobre todas las cosas.” (3.187-189).

Y:

“La gente del Libro que ha caído en incredulidad y los asociadores, no desean que os baje ningun bien procedente de vuestro Señor, pero Allah distingue con Su misericordia a quien quiere. Allah es el Dueño del Gran Favor.” (2.105).

Y:

¿No sabes que Allah Le pertenece el dominio de los cielos y de la tierra y que fuera de El no tenéis quien os proteja ni os auxilie?

¿O es que queréis poner en cuestión a vuestro Mensajero como ya hicieron con Musa? Quien toma la incredulidad en lugar de la creencia, se ha extraviado del camino llano. Muchos de la Gente del Libro desearían que renegarais después de haber creído y una vez que la verdad se les ha hecho patente, por la envidia que sienten sus almas.

No obstante perdonad y pasad por alto hasta que Allah traiga Su mandato; ciertamente Allah tiene poder sobre todas las cosas.” (2.107-109).

Y:

“¿No has visto a los que recibieron una parte del Libro cómo compran el extravío y quieren que te extravíes del camino? Pero Allah conoce mejor a vuestros enemigos. Allah es Suficiente Aliado y Suficiente Defensor.” (4.44-45).

Y también el ayat que le ordeno al Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, cambiar la dirección hacia donde rezaban, de Jerusalén a la Makka:

“Te hemos visto mirar al cielo con insistencia y vamos a darte una dirección que te satisfaga: vuelve tu rostro hacia la Mezquita Inviolable y vosotros, dondequiera que estéis, volvedlo en dirección a ella. Los que recibieron el Libro saben que es la verdad procedente de tu Señor. Y Allah no esta inadvertido de lo que hacen.

Los que recibieron el Libro no seguirán la dirección hacia la que miras aunque vayas a ellos con toda clase de signos prodigiosos; ni tú vas a seguir la suya ni ninguno de ellos seguirá la de los otros. Si siguieras sus deseos después del conocimiento que te ha venido, serías de los injustos.

Aquéllos a quienes dimos el Libro, lo conocen como conocen a sus propios hijos, pero hay un grupo de ellos que oculta la verdad a sabiendas.

La verdad viene de tu Señor, no seas de los que dudan.” (2.144-147).

Y:

“Aquéllos a quienes dimos el Libro, lo conocen como a sus hijos. Los que se han perdido a sí mismos... No creían.” (6.20).

Y:

“Di: ¡Gente del Libro! ¿Por qué negáis los signos de Allah cuando Allah es Testigo de lo que hacéis?

Di: ¡Gente del Libro! ¿Por qué desviáis de la senda de Allah a quien cree y deseáis que sea tortuosa cuando vosotros mismos sois testigos (de su verdad)? Allah no está descuidado de lo que hacéis.

¡Vosotros que creéis! Si obedecéis a algunos de los que recibieron el Libro, conseguirán haceros caer en la incredulidad después de que habéis creído.

¿Y cómo es que os negáis a creer, cuando se os recitan los signos de Allah y tenéis entre vosotros a Su Mensajero? Quien se aferre a Allah, será guiado a un camino recto.

¡Vosotros que creéis! Temed a Allah como debe ser temido y no muráis sin estar sometidos*.”

*[Es decir, no murais sin ser musulmanes] (3.98-102).

Allah le dice a los seguidores de sayyedina Muhammad que decirles al los de entre la Gente del Libro que están opuestos con rencor a los Musulmanes:

“Di: ¡Gente del Libro! ¿Qué es lo que nos reprocháis? ¿Qué creamos en Allah, en lo que se nos ha revelado y en lo que fue revelado anteriormente? La mayoría de vosotros estáis fuera del camino.

Di: ¿Queréis que os diga algo peor que eso? El pago que tiene reservado Allah para aquellos a quienes maldijo, ésos sobre los que cayó Su ira y de los cuales, hubo unos a los que convirtió en monos y en cerdos y adoraron al Rebelde. Esos tienen un mal lugar y son los que más se han extraviado del camino llano.

Cuando viene a vosotros dicen: creemos. Pero con incredulidad entraron y con ella salen. Allah sabe mejor lo que están ocultando. Verás cómo muchos de ellos se precipitan al delito y a la transgresión y se comen la ganancia ilícita. ¡Qué malo es lo que hacen!

¿Por qué no les prohiben los rabinos y los doctores mentir y comerse la ganancia ilícita? ¡Qué malo es lo que hacen!” (5.59-63).

Y:

“Y dicen los judíos: Uzayr es el hijo de Allah. Y dicen los cristianos: El Ungido es el hijo de Allah. Eso es lo que dicen con sus bocas repitiendo las palabras de los que anteriormente cayeron en incredulidad. ¡Que Allah los destruya! ¡Cómo falsean!

Han tomado a sus doctores y sacerdotes como señores en vez de Allah, igual que al Ungido, hijo de Maryam; cuando solamente se les ordenó que adoraran a un Unico Dios. No hay dios sino El. ¡Glorificado sea por encima de lo que Le asocian!

Quieren apagar con sus bocas la luz de Allah, pero Allah rechaza todo lo que no sea completar Su luz, aunque les repugne a los incrédulos. El es quien envió a Su Mensajero con la guía y con la práctica de Adoración verdadera para hacerla prevalecer sobre todas las demás formas de Adoración, aunque les repugne a los incrédulos.

¡Vosotros que creéis! Es cierto que muchos de los doctores y sacerdotes se comen la riqueza de los hombres por medio de falsedades, y apartan del camino de Allah. A los que atesoran el oro y la plata y no los gastan en el camino de Allah, anúnciales un castigo doloroso:

El día en que, en el fuego del Yahannam, sean puestos al rojo* y con ellos se les queme la frente, los costados y la espalda: “Esto es lo que habíais atesorado en beneficio de vuestras almas, gustad lo que atesorábeis”.

*[Se refiere al oro y la plata] (9.30-35).

Y Allah le dice a los seguidores de sayyedina Muhammad como tratar a los que de entre la Gente del Libro se oponen a los Musulmanes:

“Combatid contra aquéllos, de los que recibieron el Libro, que no crean en Allah ni en el Ultimo Día, no hagan ilícito lo que Allah y Su mensajero han hecho ilícito y no sigan la verdadera práctica de Adoración, hasta que paguen la yizia* con sumisión y aceptando esta por debajo.

*[La yizia es el impuesto que han de pagar los dhimmíes, que son aquéllos de la gente del Libro que establecen un pacto con los musulmanes que les permita vivir bajo la protección de éstos, quedando exentos de las obligaciones de los musulmanes y siendo respetadas sus propias leyes, pero teniendo que pagar, a cambio, un tributo y aceptar un estatuto determinado.] (9.29).

A pesar de su oposición a sayyedina Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, y al Corán, Allah invita a la Gente del Libro en todas las épocas a seguirlo:

“¡Gente del Libro! Ha venido a vosotros Nuestro mensajero aclarándolos mucho de lo que ocultábais del Libro y perdonando muchas cosas. Ha venido a vosotros, procedente de Allah, una luz y un Libro claro. Con el que Allah guía a quien busca Su complacencia por los caminos de la salvación. Y los saca de las tinieblas a la luz con Su permiso y los guía al camino recto.” (5.15-16).

Y:

“¡Gente del Libro! Os ha llegado Nuestro mensajero para aclararos las cosas, tras un período de tiempo sin mensajeros, de manera que no pudierais decir: No nos ha llegado nadie que nos trajera buenas noticias y nos advirtiera. Así pues, ahora ya tenéis un portador de buenas nuevas y un advertidor. Allah es Poderoso sobre todas las cosas.” (5.19).

Allah también dice en el Corán:

“En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo.

La gente del Libro que había caído en incredulidad y los asociadores, no han desistido hasta que no les ha llegado la Evidencia.

Un Mensajero que recita páginas purificadas. Que contienen escritos de rectitud. Asi como aquéllos a los que les dio el Libro no se dividieron sino después de haberles llegado la Evidencia.

A pesar de que no les había ordenado sino que adorasen a Allah, rindiéndole sinceramente la adoración, como hanifes y que establecieran el salat y entregaran en zakat. Y esta es la práctica de Adoración auténtica.

Y realmente los que de la gente del Libro y los asociadores, se hayan negado a creer, estarán en el fuego de Yahannam donde serán inmortales. Esos son lo peor de todas las criaturas.

Pero los que creen y llevan a cabo las acciones de bien, son lo mejor de las criaturas. La recompensa que junto a su Señor les espera, son los Jardines de Adn por cuyo suelo corren los ríos. En ellos serán inmortales para siempre. Allah estará satisfecho de ellos y ellos lo estarán de El. Esto es para quien tema a su Señor.” (98.1-8).

Y:

“Habrá triunfado quien se purifique, recuerde el nombre de su Señor y rece. Sin embargo prederís la vida de este mundo, cuando la Ultima es mejor y de mayor permanencia.

Realmente esto ya estaba en las primeras escrituras, las páginas de Ibrahim y de Musa.” (87.14-19).

De nuevo en Surah al-Mai'dah, Allah le recuerda a la Gente del Libro de la recompensa que les espera a los que siguen a sayyedina Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz- la misma recompensa que le espera a no solamente los que siguieron con sinceridad a sayyedina Musa y a sayyedina ‘Isa, sino que a los que siguieron a todos los Profetas y Mensajeros que vinieron antes y después de ellos, que las bendiciones y paz de Allah sea con todos ellos:

“Si la gente del Libro creyera y se guardara, haríamos desaparecer sus malas acciones y les haríamos entrar en los Jardines de la Delicia.

Y siguieran y pusieran en práctica la Torá y el Inyil y lo que ha descendido para ellos de su Señor, comerían tanto lo que está por encima de ellos como de lo que tienen bajo sus pies. Los hay que forman una comunidad equilibrada, pero muchos de ellos, ¡qué malo es lo que hacen! (5.65-66).

Y:

“Di: ¡Gente del Libro! No tendréis nada hasta que no sigáis y pongáis en práctica la Torá y el Inyil y lo que, procedente de vuestro Señor, os ha descendido.

Hay muchos de ellos a quienes lo que tu Señor ha hecho descender, les hace tener más rebeldía e incredulidad. Pero no te entristezcas por la gente injusta.” (5.68)

Y:

“Di: ¡Gente del Libro! No deforméis la verdad de las cosas en vuestra Práctica de Adoración; y no sigáis los deseos de unos que se extraviaron antes e hicieron que muchos se extraviaran y se alejaron del camino llano.” (5.77).

Y:

“Realmente la práctica de Adoración ante Allah es el Islam.

Los que recibieron el Libro no discreparon sino después de haberles llegado el conocimiento, por envidias entre ellos. Y quien niega los signos de Allah... Cierto es que Allah es Rápido en la cuenta.

Si te cuestionan, di: He sometido mí rostro a Allah, al igual que los que me siguen. Diles a los que recibieron el Libro y a los ignorantes: ¿No os someteréis*? Si se someten habrán sido guiados, pero si se apartan... La verdad es que a ti sólo te incumbe la transmisión. Allah ve a los siervos.

*[Es decir, ¿No os haréis musulmanes?]

Realmente los que niegan los signos de Allah y matan a los profetas sin derecho alguno y matan a quienes ordenan la equidad entre los hombres... Anúnciales un castigo doloroso.

Esos son aquéllos cuyas acciones serán inútiles en esta vida y en la Ultima; y no tendrán quien les auxilie.

¿No has visto cómo los que recibieron una parte del Libro recurren al Libro de Allah para que sirva de juicio entre ellos y cómo luego hay un grupo que da la espalda y se desentiende?

Eso es porque dicen:. El Fuego no nos tocará sino días contados. Lo que habían inventado les ha falseado su Práctica de Adoración.

¿Y qué ocurrirá cuando un día, sobre el que no cabe duda, los reunamos y a cada uno se le pague por lo que se haya ganado sin que se le trate injustamente?” (3.19-25).

Y:

“Pero los partidos que había entre ellos discreparon. ¡Perdición para los que no creyeron porque habrán de comparecer en un día transcendente! ¡Cómo verán y cómo oirán el día que vengan a Nos! Pero hoy los injustos están en un claro extravío. Y adviértales del Día de la Lamentación cuando el asunto quede decidido. Y sin embargo ellos están descuidados y no creen.

Es cierto que Nosotros heredamos la tierra y a quien haya en ella y a Nosotros regresarán.” (19.37-40).

Y:

“Pero ¿cómo podrás entender qué es el Día de la Retribución? Es el día en el que nadie podrá hacer nada por nadie. Y ese día el mandato será de Allah.” (82.17-19)

Y:

“Di: ¡Allah, Rey de la Soberanía! Das el Dominio a quien quieres y se lo quitas a quien quieres y humillas a quien quieres. El bien está en Tu mano. Realmente eres Poderoso sobre todas las cosas.

Haces que la noche entre en el día y que el día entre en la noche. Haces salir lo vivo de lo muerto y lo muerto de lo vivo; y provees a quien quieres sin limitación.” (3.26-27).

Y:

“En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo.

Di: El es Allah, Uno – Allah, el Señor Absoluto.*

*[A Quien todos se dirigen en sus necesidades]

No ha engendrado ni ha sido engendrado – Y no hay nadie que se Le parezca.” (112.1-4)

Ha sido transmitido por Abu Hurayra, que Allah este complacido con él, que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, dijo, ‘Por El en Cuya mano esta la vida de Muhammad, quienquiera de los Judíos o Cristianos que se entere de mi, pero no afirma la creencia en lo que he sido mandado (el Corán), y muera en este estado, será uno de los habitantes de el Fuego del Infierno.' (Muslim).

Ha sido transmitido por Abu Musa al-Ash'ari, que Allah este complacido con él, que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, dijo, ‘Si alguien cree en ‘Isa ibn Maryam y luego cree en mi, entonces tendrá doble recompensa.' (Al-Bukhari).

Ha sido transmitido por ‘Ubada, que Allah este complacido con él, que el Profeta Muhammad, que Allah lo bendiga y que le dé paz, dijo, ‘Quienquiera que atestigüe que no hay Dios más que Allah, sólo sin socio; y que Muhammad es Su siervo y Mensajero, y que ‘Isa es el siervo de Allah y Su Mensajero y Su Palabra que otorgo a María y un Espíritu de El; y que el Jardín es verdad y que el Fuego es verdad – entonces Allah lo hará entrar a el Jardín, sin importar que tan poquitas buenas acciones haya hecho.' (Al-Bukhari).


 

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